La verdad es increíble escuchar las estupideces que piensan y dicen algunos políticos, es decir, por ejemplo, ¿cuánto es un hueco mas medio hueco?, si usted respondió hueco y medio, está medio idiota como el humaliento Fredy Otárola, ya que no existe el medio hueco, ¡¡ASÍ COMO TAMPOCO EL MEDIO PASO!!
Según el susodicho, quien luego de mi explicación puede escoger si no es idiota, o si es idiota completo (ya que la figura de medio idiota tampoco existe): “Él,(Chehade), ya ha dado medio paso al costado. Se ha autoseparado. Esperemos unos días y si es necesario tendrá que apartarse de la Vicepresidencia”. ¿?
Según el humaliento, hay quienes quieren disminuir el poder del Gobierno y quisieran que Chehade hubiera renunciado definitivamente, (¡¡como si también existiera la media renuncia!!), pero reinó el principio de presunción de inocencia.
“Si Chehade renuncia y las investigaciones determinan que no hubo ningún ilícito, habría un problema de procedimientos...Recuerden que en el Perú existe la presunción de inocencia. Esperemos que avancen las investigaciones, que haya resoluciones y luego veremos qué medidas adicionales se toman”, agregó el otorongo.
Sin embargo y por suerte, no todos los humalientos piensan como el otorongo "medio idiota", por ejemplo el otorongo nacionalista José Rimarachín, opina que al vicesegundón no se le trata como a otros otorongos acusados de corrupción y malos manejos.
“Cuando salieron las denuncias contra Amado Romero y Celia Anicama, que son provincianos emergentes, allí mismo se les separó de la bancada. Creo que todos somos iguales ante la justicia y no debe haber privilegios” dijo más indignado que el ciego al que le cambiaron su rondín por una navaja.
¿Hasta cuando el vicesegundón seguirá atrayendo la mirada de la prensa?
Ya se dice por allí que el pedido de Ollanta, quien le dijo al vicesegundón que por favorcito, a ver si lo socorría renunciando, sólo ha sido una estrategia comunicacional digitada por el equipo del publicista Luis Favre para manejar la ‘crisis’ que enfrenta el Gobierno y, de paso, posicionar la imagen presidencial, y que también estaría asesorando a Chehade y a la bancada nacionalista.
Pero como ya saben yo estoy loco, así que mejor no me hagan caso y saquen ustedes sus propias conclusiones.
No se pierdan el próximo capítulo de su blog la Guadaña, que se viene escribiendo desde una habitación acolchada de un manicomio local.