El premier, Salomón Lerner, (quien como ya sabemos, en su niñez protagonizó el filme "El Niño Rata"), ha optado por invitarles un sándwich de esparadrapo a cada uno de los 17 ministros, con el sólo fin de que no puedan expresarse , es decir, les ha prohibido declarar ante cualquier medio de comunicación sobre asuntos de Gobierno y además , para colmo, que le informen de cualquier entrevista que se les solicite.
Como ya se imaginarán, este hecho ha puesto a la mayoría de Ministros, más descontentos que perro encadenado.
Según el oficio N°020-2011-PCM/DM –firmado por el ex niño-rata–, los Ministros “deberán tener en cuenta que las declaraciones multisectoriales a la prensa son de competencia del Presidente del Consejo de Ministros”.
Como si esto fuera poco, les ha advertido (aunque más suena a amenaza) que: “cualquier entrevista sobre asuntos de filosofía global y específicamente sobre modificaciones legales y constitucionales, se hallan en el campo de las atribuciones del Presidente de la República y, por su delegación, son de responsabilidad del Presidente del Consejo de Ministros”. Es decir, ahora los Ministros están bajo los ojos y el mando de una especie de Gestapo made in Perú.
Según el diario Perú 21, Lerner ha dicho que los “ministros gozan de total libertad para declarar sobre temas de sus respectivos sectores, pero deberán informar a la PCM, vía correo electrónico, las declaraciones a la prensa que hagan”. es decir, puedes decir lo que tú quieras, pero luego te atienes a las consecuencias.
Por lo tanto, si este oficio "tapahocicos" sustenta que “El inicio de las actividades del gobierno exige la mayor cohesión política del Consejo de Ministros”, evidentemente, la sesión secreta que hizo el congreso para expectorar a la chillona tía Martha Chávez, no fue una mera coincidencia, más aún, cuando ya el Presidente del Congreso Daniel Abugattás (más conocido como papá pitufo) declaró, al diario El Comercio, que odia a todos los medios de comunicación.